Los salvajes trols de Azeroth son infames por su crueldad, misticismo oscuro y ferviente odio por todas las demás razas. No obstante, los trols de la tribu Lanzanegra y Vol’jin, su astuto líder, son la excepción. Plagados por una historia de esclavitud y exilio, esta orgullosa tribu se encontraba al borde de la extinción cuando el Señor de Guerra Thrall y su imponente Horda terminaron varados en su isla —ubicada en los Mares del Sur— debido a una terrible tormenta.
Los Lanzanegra, dirigidos en ese entonces por Sen’jin, el sabio padre de Vol’jin, abandonaron sus prejuicios y trabajaron con los orcos de Thrall para derrotar a un grupo de humanos que invadían la isla selvática. Con valor incomparable, los trols lucharon junto a la Horda para obtener la victoria, pero la tragedia descendió sobre los Lanzanegra poco después. Decididos a apaciguar a una misteriosa bruja marina, una banda de frenéticos múrlocs capturaron a los defensores de la isla. Pese a que algunos de los orcos y trols lograron escapar, el noble Sen’jin fue asesinado por sus captores.
En honor de Sen’jin, Thrall dio la bienvenida a los Lanzanegra como parte de la Horda y les ofreció refugio en un nuevo reino que planeaba fundar del otro lado del Mare Mágnum. Los trols aceptaron la oferta y Vol’jin eventualmente condujo a su tribu hacia las vibrantes junglas de las Islas Eco, ubicadas justo frente a la accidentada costa de Durotar.
